Uno de los momentos clave en cualquier carrera profesional es solicitar una subida de salario o negociar un bonus. Todos los puestos deben afrontar estas decisiones, pero ¿cómo hacerlo si eres un alto ejecutivo?
Es importante señalar que negociar las condiciones relativas al sueldo no consiste únicamente en solicitar más masa salarial, sino que precisa de una reflexión sobre aquello que ofrecemos a la compañía y lo que recibimos de ella. Si tras realizar este análisis consideramos que estamos desempeñando funciones por encima del cargo actual es indicativo de que ha llegado el momento de proponer un aumento de sueldo, y para ello, es imprescindible una buena argumentación.
Desde AdQualis Human Results, proponen una serie de consejos a seguir en el desarrollo del proceso:
1. Escuchar antes de hablar:
Siempre conviene tener en cuenta que la otra parte también tiene planes B. Conocer y comprender los argumentos de nuestros interlocutores, permitirá obtener un mayor rendimiento del proceso de negociación en todos los sentidos.
2. Prepara tu benchmark:
Es importante que conozcas tu valor real en mercado
(puesto, sector, localización).
3. Sé claro y realista con las expectativas:
A la hora de comunicar, debemos ser transparentes con las expectativas salariales, y, sobre todo, nunca improvisar, si queremos que nuestra propuesta sea valorada por la otra parte. Para ello, es importante buscar criterios legítimos de los objetivos que nos hemos marcado, pero, de entrada, el incremento habitual oscila entre un 15% y un 20%.
4. Prioriza:
Antes de comenzar una negociación salarial, y dado que cada caso es diferente, se deben identificar los elementos de mayor valor añadido
como los beneficios sociales, mayor variable, incremento del fijo, pactar revisiones a corto plazo... entre otros.
5. El “No” no da miedo:
La asertividad es uno de los mejores aliados en cualquier tipo de negociación. En el ambiente laboral también se puede decir “no”, siempre de una manera amable, y profesional, pero marcando claramente las líneas rojas.
6. Actitud positiva: La calma y el control de las emociones suelen contribuyen al éxito en este tipo de procesos.
7. Valorar el paquete retributivo global. Ampliar opciones de negociación:
El salario fijo suele ser el punto que más cuesta mover por parte de las empresas, debido a su impacto inmediato en la cuenta de resultado. Si existe la posibilidad de modificar la parte variable/ bonus o beneficios sociales, es recomendable intentar avanzar en este sentido.
8. El Head Hunter “es uno de tus mejores aliados”:
Un headhunter te da visibilidad de toda aquella información importante que necesitas para mantener una postura realista, por lo que su opinión, cuenta.