Let’s Go Engineering
nace del análisis de la situación actual en España, donde faltan profesionales de la ingeniería para cubrir las necesidades del mercado, ya que, según el Ministerio de Educación y Formación Profesional, solo un 17,9% de los estudiantes se decantan por la rama de 'Ingeniería y arquitectura'.
A esta situación, hay que sumar una falta de diversidad en el mundo de la ingeniería. Los colegios profesionales contabilizan que, por cada 2 ingenieras, en España hay 8 ingenieros. El informe PISA 2015 señala que, en el promedio de países de la OCDE, el 12% de los chicos esperaba trabajar en sectores de ciencia e ingeniería, mientras que ese porcentaje en las chicas se reducía al 5,2%.
El mismo informe indica que, en España, solo un 7% de las estudiantes de 15 años quiere estudiar una ingeniería o carrera informática, mientras que el porcentaje, en el caso de los chicos, alcanza casi el 25%.
Las principales razones por las que existe esta falta de interés por la Ingeniería, especialmente en las chicas, es debida a que se considera que las carreras tecnológicas requieren un esfuerzo mayor, que no se ve recompensado al acceder al mercado laboral; Hay una falta de modelos de referencia actuales y atractivos para que los y las adolescentes con habilidades TIC puedan reforzar su rol frente al grupo y no verse etiquetados como raros; el factor socio-económico – educación padres (especialmente educación madre) directamente relacionado con vocaciones de ingeniería; Falta de diversidad en el mundo de la tecnología, que se manifiesta desde los Institutos y la Universidad; los estereotipos de género y STEM (cómo nos marcan desde muy pequeños si algo es para niños o para niñas en juguetes, ropa….incluso estudios); Falta mostrar el propósito humano de la tecnología (estudios confirman que, habitualmente, los hombres prefieren trabajar con cosas y las mujeres con “personas”).
OBJETIVOS
- Romper estereotipos de género
desde una temprana edad, reforzar valores y descubrir la ingeniería y la tecnología a niñas y niños en alianza con la comunidad educativa y las familias. En nuestra opinión, la ingeniería es una forma de participar en la creación de soluciones para mejorar nuestro mundo, desde la curiosidad, el método científico, el uso de la tecnología y el desarrollo de valores como la colaboración, la sostenibilidad, la diversidad y la inclusión.
- Que las niñas descubran modelos a seguir en mujeres
que han contribuido y contribuyen a transformar nuestras vidas con su ingenio y haciendo uso de las nuevas tecnologías. Es fundamental que tanto las niñas como los niños desarrollen admiración por los profesionales de las tecnologías, cualquiera que sea su género. Debemos facilitar que los docentes y las familias dispongan de ejemplos atractivos para inspirar y proponer a los más jóvenes.
- Ayudar a desarrollar los valores y las habilidades que aporta el descubrimiento de la ingeniería: Deseo de mejorar el mundo; Invención en diferentes campos; Análisis y resolución de problemas; Creatividad, indagación e investigación; Trabajo en equipo; Autonomía, confianza en uno mismo; Superación de obstáculos, resiliencia; Aprendizaje continuo.
METODOLOGÍA
LET’S GO ENGINEERING es un programa “PILOTO” inspirador y de actividades, impulsado por Schneider Electric, que quiere fomentar y despertar vocaciones tecnológicas en estudiantes de últimos cursos de Primaria en centros educativos públicos, concertados y privados.
El programa 'Let's Go Engineering' se realiza durante un curso escolar y se compone de varias fases, a lo largo de las cuales se realizan diferentes actividades que pretenden despertar la creatividad de los estudiantes y mostrar el impacto humanitario y beneficio social de la tecnología, hecho que motiva especialmente a las niñas en la realización de las actividades tecnológicas.
Cada clase incluida en el programa se prepara de forma conjunta entre el equipo de voluntari@s que integra 'Let's Go Engineering' y el profesorado responsable en cada aula. Además, se hace un acompañamiento a las familias a través de las AMPAs, para que sean conocedores de la realidad, contribuyan a romper estereotipos y sean también agentes del cambio en la mentalidad de las nuevas generaciones.
Para incrementar el número de vocaciones en el ámbito de la ingeniería, el trabajo debe empezar desde la infancia: Padres y madres, por igual, deberían estimular el desarrollo de las habilidades de sus hijos e hijas de manera abierta (cada vez hay más juegos atractivos para desarrollar habilidades tecnológicas); Los docentes deben llevar a cabo una motivación en las aulas (su labor es fundamental) para que las alumnas y alumnos (i) descubran la “magia” del conocimiento que esconden las asignaturas de ciencias, lo divertidas que pueden ser, (ii) que comprueben que el esfuerzo merece la pena y descubran, de su mano, cómo la aplicación de la tecnología consigue mejorar la vida de las personas y (iii) para que cada vez más, sea mayor el respeto hacia aquellos niños y niñas que opten por una formación en disciplinas STEM (huir del calificativo de “frikis” es esencial, sobre todo en unas edades en las que la popularidad y la imagen que proyectan a los demás es de suma importancia para ellos, y para eso, es necesario procurarles referentes atractivos, no sólo en el acontecer histórico, sino también en sus entornos más cercanos: películas, series, etc.).
A través de ejemplos, se les explica cómo puede impactar la ingeniería en nuestras vidas, cómo la tecnología cambiará la forma en la que viviremos en el futuro y su trascendencia social, así como la importancia de que dicho futuro tecnológico esté formado tanto por hombres como por mujeres, considerando siempre la riqueza de la diversidad.
Por este motivo, y con el objetivo de atraer el máximo talento femenino, se presentan casos de mujeres actuales que puedan llegar a ser un referente en el campo para los/as estudiantes, concienciando así de la existencia de prejuicios sexistas en relación con las profesiones.
A través de una encuesta diseñada por ICE, UPC, se está evaluando actualmente el impacto del proyecto desde el inicio en Sept’18 hasta su finalización en Junio’19.
RESULTADOS
Hasta hoy, 8 meses después, estamos trabajando con más de 400 estudiantes de últimos cursos de Primaria, en 4 ciudades distintas y la red de voluntarios y voluntarias de Schneider Electric la forman ya 60 personas, repartidas por todo el territorio y cada día sumando a más gente interesada.
Niños y niñas esperan con gran interés que el equipo de Schneider realice las actividades de nuevo en su aula escolar.
El feedback de los colegios está siendo muy positivo, tanto de profesores como alumn@s y familias, y hemos recibido ya solicitud de varios centros educativos interesados en iniciar el programa en 2019-2020.